Los grabados en planchas y las artes gráficas
El grabado es considerado una de las primeras técnicas de reproducción industrial, esta técnica permite la reproducción en serie de un diseño. También llamamos grabado al resultado de aplicar esta técnica, pues se denomina grabado al papel impreso resultante de la serie de impresión o a la plancha donde se realizaron las incisiones para componer el dibujo. Los grabados se basan en la talla dulce, aunque existen muchos métodos de grabado (punta seca, buril...), pero la idea principal es dibujar un diseño sobre una plancha de zinc o de cobre e ir haciendo hendiduras siguiendo el trazado, el dibujo que se realice deberá estar hecho al revés para cuando se imprima al invertir la imagen, ésta esté al derecho. Una vez preparada la plancha se entinta y se limpia la superficie (sólo quedará tinta en los surcos), se coloca el papel encima y se pasan los rodillos de la prensa (estampado) y ya tenemos nuestro grabado. Como podemos observar, es una técnica muy similar a la que se utiliza en el caso de las imprentas y en consecuencia en las artes gráficas. Todo este proceso nos ha recordado tanto el proceso de reproducción de huecogrado, como el de offset o cualquier otro de los procesos de impresión de las artes gráficas con la que comparte ciertas similitudes. Si recordamos, la impresión en relieve es aquella en la que se imprime precisamente la zona no tallada (en relieve), la impresión en hueco es la que imprimirá las zonas en bajorrelieve o zonas que se han grabado y donde la tinta se acumulará, la impresión planográfica se basa en la repulsión agua/grasa y la impresión serigráfica se basa en la estampación, en definitiva, tanto los grabados de siglos como el XVII o un cartel actual, comparten ciertas similitudes.
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